6 habilidades para desarrollar la inteligencia emocional

6 habilidades para desarrollar la inteligencia emocional

Durante mucho tiempo se ha demostrado que para sobrevivir con éxito en el mundo moderno, la inteligencia ordinaria no es suficiente. Es necesario no sólo interpretar cualitativamente la realidad circundante, sino también comunicarse con otras personas. Y en este caso, no se puede prescindir de una inteligencia emocional desarrollada. En este artículo, aprenderá las seis habilidades más importantes que debe practicar para mejorar su EQ.

Empatía

La empatía es la capacidad de comprender o sentir lo que otra persona está experimentando en el marco de su sistema de creencias, es decir, la capacidad de ponerse en el lugar del otro.

Hay dos formas de empatía: afectiva y cognitiva. El primero incluye sensaciones y sentimientos que experimentamos en respuesta a las emociones de otras personas. La segunda es la capacidad de identificar y comprender las emociones. Y es este tipo el que nos interesa en el contexto del desarrollo de la inteligencia emocional. Una comprensión clara de las emociones de la otra persona te ayudará a interactuar con ella correctamente.

¿Cómo desarrollar esto?

Lleve un diario en el que registre sus observaciones de las emociones, tanto las suyas como las de los demás. Observe cómo reaccionan ante ciertas acciones suyas y cómo responde usted a ellas. Esto le ayudará a formar patrones de interacción nuevos y más eficaces con los demás.

Conciencia de sí mismo

“Conócete a ti mismo” – inscripción en la pared del Templo de Apolo en Delfos

La autoconciencia es el arte de comprenderse a uno mismo, a sus estímulos, motivos y reacciones posteriores. También es una parte importante de lo que llamamos autocontrol. La autoconciencia tiene un aspecto interno: cómo nos percibimos a nosotros mismos; y externo: comprender cómo nos ven los demás.

¿Cómo desarrollar esto?

En cuanto al aspecto interno, aquí debe observarse a si mismo, analizar sus motivos y acciones. Puede comenzar con un análisis FODA , que ayudará a identificar las principales fortalezas y debilidades, así como amenazas y oportunidades. Además, debe mirarse a si mismo desde fuera. Y no hay mejor manera que los comentarios de los demás. Simplemente pídale a alguien que conozca que realice el mismo análisis FODA de su personalidad.

Curiosidad

“No tengo ningún talento especial. Tengo curiosidad». – Albert Einstein

Muéstreme una persona curiosa que esté dispuesta a aprender y mejorar, y le mostraré una historia de éxito esperando a suceder. La curiosidad genera pasión, que a su vez genera alta productividad y motivación. Esto es importante para el desarrollo de cualquier tipo de inteligencia, especialmente la inteligencia emocional. La curiosidad es la chispa que siempre alimentará tu deseo de comprender a las personas.

¿Cómo desarrollar esto?

La curiosidad, en un grado u otro, es inherente a todas las criaturas muy inteligentes, especialmente a los humanos. Sólo hay que animarlo y ceder ante él. Afortunadamente, cuando se trata de estudiar el comportamiento humano, es difícil encontrar algo más interesante y cercano a todos nosotros. Recién estás comenzando.

Pensamiento analítico

Si hablamos de la inteligencia emocional como un proceso cognitivo, entonces no podemos prescindir de unas habilidades de pensamiento analítico desarrolladas. Se enfrentará a un objeto extremadamente difícil de entender: una persona. A la antigua usanza, suena como “Alma alienígena de las tinieblas”. Esto significa que tendrá que pensar mucho sobre qué, cómo y, lo más importante, por qué la gente hace las cosas.

¿Cómo desarrollar esto?

La clave del pensamiento analítico es la capacidad de aplicar las leyes de la lógica y evitar errores lógicos. Concéntrese en esto primero.

Necesidades y deseos

Todo comportamiento humano puede ubicarse dentro de la jerarquía de necesidades de Maslow. La base de la pirámide está ocupada por cosas tan básicas como las necesidades fisiológicas y la seguridad, y en la cima están las necesidades estéticas y espirituales. Una persona emocionalmente inteligente debe ser capaz de atribuir determinadas acciones humanas a diferentes niveles de necesidades para poder comprender la verdadera motivación. También es necesario distinguir las necesidades reales de los deseos: los últimos tienen como objetivo la realización de las primeras.

¿Cómo desarrollar esto?

Utilice la técnica del diagrama de por qué. Realice cualquier acción y formule la pregunta “¿Por qué la persona hizo esto?” Una vez que tenga su respuesta, utilice la misma pregunta nuevamente. Tarde o temprano llegará a algún nivel de la pirámide de Maslow. Y muy a menudo será el de abajo.

Comunicación no verbal

Una de las formas más fiables de conocer el estado emocional real de una persona es observar su comportamiento no verbal. Esta habilidad por sí sola le permitirá dar un gran salto en su capacidad para interactuar con las personas. Recientemente, la ciencia ha logrado importantes avances en esta área y ahora no es necesario adentrarse en la jungla de la pseudociencia de la fisonomía.

¿Cómo desarrollar esto?

Estudie el comportamiento no verbal y observe a las personas. Cónyuge, hermano, hermana, jefe, subordinado, vendedor: ahora todos trabajan para desarrollar su EQ. También puede realizar nuestro curso de perfilado .

Resumen

La inteligencia emocional es un concepto complejo que implica el dominio de muchas habilidades. Estos incluyen empatía, autoconciencia, curiosidad, pensamiento analítico, comprensión de las necesidades básicas e interpretación de señales no verbales. Todo ello te ayudará a identificar correctamente las emociones de otras personas y gestionarlas para conseguir tus propios objetivos.

redactor
Lorenzo Infante

Grado en Periodismo por la Universidad Politécnica de Madrid. Experto en redacción Web. He tenido la oportunidad de trabajar en una gran variedad de plataformas digitales y medios impresos. Creativo y apasionado de la lectura, con el objetivo es seguir explorando nuevas formas de contar historias y dejar una impresión duradera en cada palabra que escribo.