Paciencia: la capacidad de afrontar emocionalmente la falta de resultados

Paciencia: la capacidad de afrontar emocionalmente la falta de resultados

«La gente sobreestima lo que puede hacer en un año y subestima lo que puede hacer en cinco años».

Tony Robbins

¿Alguna vez has pensado que lo único que se interpone entre ti y lograr tu objetivo es la paciencia? Todo el mundo recordará casos en los que abandonó un negocio que había iniciado. Podría haber sido justo en la meta, pero lo más irónico es que él no lo sabía. Después de todo, a menudo dejamos lo que estamos haciendo cuando no hay ningún progreso tangible.

El ejemplo más urgente es aprender inglés. Muchos hicieron al menos un intento de aprenderlo, pero luego se calmaron. ¿Por qué? Cualquier gran objetivo consiste principalmente en rutina y carece de retroalimentación.

La importancia de los pequeños pasos

Un gran objetivo consta de mil pequeños pasos hacia él. Es extremadamente importante recordar esto constantemente. Estamos tan acostumbrados a satisfacer nuestras necesidades de forma inmediata que no somos capaces de mirar hacia delante varios meses, y mucho menos años. Ni siquiera tengo paciencia para esperar a que se cargue la página web. Pero el secreto del éxito reside en todo lo contrario. Elon Musk dijo sobre él de manera bastante simple: “Trabajé 15 horas al día durante varios años”.

Los resultados son siempre desiguales. Este mes ves y sientes progreso, y el siguiente tienes una vaga sensación de que nada funciona. Es difícil decir si es cierto o no. Pero una cosa es segura: si lo deja, su progreso no será más notorio. Contrariamente a la creencia popular, empezar siempre es más fácil que continuar. Cuando empiezas a trabajar en un gran proyecto, tienes algo que decir, estás lleno de energía y motivado. Cada día entiendes más claramente que no todo es tan sencillo. El romance y el entusiasmo juvenil desaparecen, la energía se agota, la motivación desaparece en alguna parte.

Tenga en cuenta también que siempre habrá más trabajo del previsto inicialmente. En este caso, la paciencia y sólo la paciencia vendrán al rescate. Y aunque en esta etapa no eres capaz de realizar avances creativos, comienzas a hacer cosas rutinarias con paciencia. Editas texto en lugar de escribir una historia, creas entendimiento entre los empleados en lugar de encontrar soluciones comerciales, perfeccionas tu antigua pieza musical en lugar de componer una nueva. En lugar de detenerse por completo, su locomotora interna simplemente se desacelera. Y al día siguiente te resultará más fácil aumentar la velocidad, ya que el movimiento se produce por inercia.

La importancia de las emociones

Hay que estar preparado, ante todo, emocionalmente, porque son las emociones las que te controlan cuando no hay resultados. Antes de emprender un proyecto que requiera meses de trabajo, recuerda que los contratiempos y los contratiempos son inevitables. ¿Cómo te comportarías en una situación así? ¿Renunciar y desesperarse? ¿O simplemente recuerda que esto es temporal y que estarás preparado emocionalmente?

Cualquiera puede hacer mucho si está en movimiento o si tiene inspiración. En este estado, no necesitas ningún incentivo, simplemente te pones manos a la obra con mucho gusto. Cuando se produce la regresión y no se ven resultados, es la estabilidad emocional la que ayuda a no darse por vencido.

La importancia de comprender cómo adquirir experiencia en el trabajo

“Lo principal es pelear y luego ya veremos”, son las famosas palabras de Napoleón, que debería repetir cualquiera que haya comenzado a trabajar en un proyecto a largo plazo. Nunca podrás pensar en todo, surgirán trampas una y otra vez y aparecerán problemas donde no se esperaban. Si estás empezando a escribir un libro, es importante comprender que, independientemente de tu experiencia actual, habrá mucho que aprender a lo largo del camino. Esto siempre sucede a la hora de realizar proyectos relacionados con la creatividad.

Serás una persona antes de escribir el libro y una persona completamente diferente después. El problema de mucha gente es que no entienden esto. Lo que no entienden es que mientras trabajas en un proyecto te verás obligado a aprender muchas cosas nuevas. Y eso es completamente normal. Si completaste un gran proyecto y seguiste siendo exactamente la misma persona, entonces solo hiciste un trabajo de rutina.

La importancia de reconocer el valor del proyecto

Antes de comenzar un esfuerzo global, pregúntate si vale la pena el tiempo que has planeado y si valdría la pena duplicar o triplicar ese tiempo. Responde esta pregunta incluso antes de empezar a trabajar. Mucha gente se fija plazos poco realistas para completar los proyectos. ¿Es de extrañar entonces que sigan sin terminar?

Puedes fijarte tres objetivos increíblemente ambiciosos, cuya pasión no se desvanecerá con los años, y trabajar en cada uno de ellos durante el tiempo que sea necesario. Después de todo, vale la pena.

redactor
Lorenzo Infante

Grado en Periodismo por la Universidad Politécnica de Madrid. Experto en redacción Web. He tenido la oportunidad de trabajar en una gran variedad de plataformas digitales y medios impresos. Creativo y apasionado de la lectura, con el objetivo es seguir explorando nuevas formas de contar historias y dejar una impresión duradera en cada palabra que escribo.