Diseño de páginas web: ¿hacerlo tú mismo o contratar expertos?

En este tiempo, si tu negocio o proyecto personal no está en internet, prácticamente no existe. Quizás esto ya lo sabes y por esa razón quieres dar el salto digital, pero te enfrentas a un dilema: ¿creas la página web tú mismo o contratas a alguien que lo haga por ti?
Para elegir entre una u otra opción, tienes que conocer los pros, los contras y algunos otros detalles. Esto te servirá para tomar una decisión acertada y no tengas que arrepentirte más adelante.
Hacerlo tú mismo con plataformas de diseño web
Seguro te has topado con anuncios como este: “Crea tu web en 5 minutos, sin saber de programación”. Esto es algo completamente posible, gracias a plataformas como Wix, Squarespace o WordPress, que hacen que cualquiera pueda montar algo decente e incluso bastante avanzado.
Lo bueno de hacer tu propia página web:
- Gastas menos dinero porque no tienes que pagar diseñadores ni agencias.
- Tienes control absoluto de tu sitio web. Tú decides cada detalle del diseño y contenido. Además, si se te ocurre hacer algún cambio fuera de horarios laborales, no habrá nadie que te lo impida.
- Es una forma de aprender algo nuevo, en este caso, cómo funciona el diseño web.
Lo malo:
- Si bien las plataformas para crear páginas web son intuitivas, requieren tiempo para dominarse.
- Las plantillas suelen tener diseños genéricos y pueden limitar la originalidad de tu sitio. Al final, te darás cuenta de que tu web termina pareciéndose a muchas otras.
- Si no posees conocimientos técnicos, puede que crees una página muy bonita, pero afectar su velocidad y posicionamiento.
Si finalmente decides seguir este camino, es aconsejable que inviertas en un buen hosting y dediques tiempo a aprender sobre velocidad de carga, palabras clave y experiencia de usuario. No querrás —ni te conviene— que tu página tarde 10 segundos en abrirse.
Contratar a diseñadores web o una agencia de diseño web
Si buscas un resultado profesional, único y optimizado para tus objetivos, la mejor decisión que puedes tomar es delegar el trabajo a expertos. Empresas como Rc Diseño Web ofrecen soluciones personalizadas que se adaptan a las necesidades de cada cliente. Sí, es más caro, pero a veces lo barato sale caro.
El trabajo de un profesional no es solo poner bonitos colores, sino que una buena agencia de diseño web trabaja en aspectos como la jerarquía visual para guiar al visitante sin que se dé cuenta y la arquitectura de información, para que los usuarios encuentren lo que buscan con unos pocos clics.
También, se encaran de aquello que no ves, pero necesitas, por ejemplo, compresión avanzada de imágenes, caché optimizado y marcado Schema para rich snippets
Ventajas de dejar el trabajo en manos de expertos:
- Tu web tendrá un diseño profesional hecho a tu medida, es decir, no es una plantilla reciclada, es algo hecho especialmente para tu marca, un sitio atractivo y funcional.
- Los expertos optimizarán tu web para los motores de búsqueda.
- Mientras tú te dedicas a lo tuyo, los profesionales trabajan. Por lo tanto, no pierdes tiempo en tareas que no se relacionan directamente con tu negocio.
Los contras:
- Requiere una inversión más alta que hacerlo por tu cuenta.
- Para cambios futuros, quizás necesites asistencia profesional. Aunque normalmente las agencias capacitan a los clientes para que se encarguen de ciertas situaciones sin depender de los profesionales.
Si después de considerar estas ventajas y desventajas prefieres contratar profesionales, toma en cuentas estos aspectos:
- Que tengan un portafolio real (no solo plantillas modificadas).
- Que expliquen claramente el proceso a seguir, con etapas definidas.
- Soporte post-entrega. En otras palabras, que no desaparezcan después del pago.
- Que tengan un enfoque estratégico y pregunten por tus objetivos de negocio, para que la web a diseñar se adapte perfectamente a ellos.
¿Qué necesita realmente tu proyecto?
Ya te hemos hablado de las dos opciones, pero antes de decidir te queda pendiente hacerte estas preguntas:
- ¿Es una web sencilla (como un portafolio o un pequeño negocio)? ¿Es un proyecto experimental? En estos casos, puedes intentarlo por tu cuenta. En internet hay muchos tutoriales que te ayudarán paso a paso.
- ¿Es una tienda en línea, un sitio web corporativo o un proyecto serio que necesita credibilidad? Entonces, mejor llama a los profesionales.
- ¿Tienes tiempo para aprender o prefieres resultados ya? Evalúa qué priorizas para que des con la respuesta.
No obstante, no todos son extremos, existen algunas alternativas intermedias, por ejemplo, puedes contratar solo el diseño y mantenerlo tú después, usar un constructor, pero con asesoría profesional inicial, o comprar plantillas premium personalizadas por un experto.
Mitos sobre el diseño de páginas web que debes dejar de creer
En torno al diseño de páginas web, se dicen muchas cosas, y una buena parte de ellas no son del todo ciertas. Aquí tienes tres ejemplos comunes:
- Si la web es bonita, ya está todo listo. Esto es falso. El sitio web debe funcionar bien en móviles, cargar rápido y estar optimizado. Todo esto es algo que va más allá de una plantilla atractiva y la elección de colores.
- Los diseñadores web son un lujo. En realidad, contratar a uno de estos profesionales te ayudará a ganar más dinero, por lo tanto, mira su trabajo como una inversión.
- Puedo copiar el diseño de otra página y ya. La verdad es que puedes hacerlo, pero, además de ser poco original, puede traerte problemas legales.
Entonces… ¿Diseño yo mismo la web o contrato a alguien?
Si eres un autodidacta que disfruta aprendiendo y tienes un proyecto pequeño, prueba diseñarlo tú valiéndote de las herramientas mencionadas antes y de los recursos disponibles en línea.
Pero si se trata de algo serio, con lo que quieres ganar dinero, y no quieres dolores de cabeza, mejor busca una agencia de diseño web con buena reputación que incluso pueda encargarse de otros aspectos de tu presencia en internet, como el SEO, creación de contenidos y gestión de redes sociales.
Ten en cuenta esto al hacer tu elección: al final, se trata de que tu página sea tu mejor tarjeta de presentación, no un experimento fallido. ¿Por cuál camino te irás?