10 problemas de salud comunes que a veces aparecen en los bulldogs franceses

Bulldog francés

Los miras y te preguntas: ¡no puedes ser tan lindo! Y las orejas son como las de un murciélago, y el rostro es muy expresivo, además de un abrigo de piel de terciopelo, un andar divertido y un carácter interesante. La raza está ganando popularidad, ascendiendo a lo más alto de las preferencias en todo el mundo: en Estados Unidos, por ejemplo, el año pasado los bulldogs franceses “derribaron del pedestal” al favorito universal, el Labrador Retriever, que encabezaba la lista de razas deseadas desde hace más de 30 años.

Sin embargo, como todas las razas toy criadas artificialmente, los bulldogs están predispuestos a una variedad de problemas de salud (un estudio del Royal Veterinary College encontró que el 72% de los franceses tienen al menos uno).

Hoy, analizaremos la genética, la anatomía y las recomendaciones veterinarias para ellos. Vigilancia, ante todo, para que el pequeño “gruñidor” de peluche sea feliz y viva los años que le corresponden.

¿Por qué los Bulldogs franceses son propensos a tener problemas de salud?

Bulldog francés enfermo

Los Bulldogs franceses son amados por su apariencia única. Sin embargo, están naturalmente predispuestos a muchos problemas de salud. Una selección compleja destinada a lograr su apariencia no estándar (nariz corta, orejas grandes y tamaño corporal pequeño) conduce exactamente a esto.

Y como la mayoría de estas dificultades son congénitas, los animales requieren cuidados veterinarios durante toda la vida del perro. Esto puede afectar el bienestar de la mascota y resultar costoso para el dueño. Las visitas periódicas a un especialista son muy importantes. Los Bulldogs franceses adultos deben visitar al veterinario una vez al año y los perros mayores de 11 años deben visitar al veterinario cada seis meses. Así, con los cuidados adecuados, un Bulldog Francés sano puede vivir de 10 a 14 años.

10 problemas de salud comunes de los bulldogs franceses de los que los criadores a menudo no hablan

Si estás pensando en adquirir un Bulldog Francés, es importante saber más sobre esta raza. Muchas dificultades son causadas por los genes, y es muy importante tener en cuenta este hecho, ya que todo esto muchas veces requiere un tratamiento constante y afecta significativamente la vida del perro. Las personas que quieran tener uno deben estar preparadas para estar alerta y tener muchos problemas.

1. Problemas de la piel

Los Bulldogs franceses, apreciados por su piel distintiva y los pliegues de su cola, desafortunadamente tienen un mayor riesgo de sufrir alergias cutáneas frecuentes, que afectan más comúnmente a:

  • patas
  • estómago
  • pliegues
  • orejas

Los signos comunes incluyen picazón intensa, enrojecimiento de la piel, erupciones cutáneas, puntos calientes, caída del cabello, protuberancias rojas y granos. Las alergias suelen comenzar cuando los perros tienen entre 1 y 3 años. Pero encontrar la causa exacta, como los alimentos, el medio ambiente (como el polen y el polvo) o los alérgenos de contacto de los productos de limpieza, puede resultar difícil y costoso.

Además, las pulgas y los parásitos provocan hipersensibilidad, por lo que es importante tratar a tus mascotas con regularidad. Hay tratamientos disponibles y el animal puede necesitarlos durante toda su vida, lo que puede aumentar el costo de mantenimiento de tu mascota. Mantener limpios los pliegues de la piel de tu perro es clave para prevenir estos problemas. Si notas síntomas, contacta con tus veterinarios: ellos podrán diagnosticar y tratar correctamente a tu mascota, ayudándole a vivir una vida mejor.

2. Síndrome obstructivo de las vías respiratorias braquicéfalo

El síndrome de obstrucción braquicefálica de las vías respiratorias es un problema de salud común en muchos perros, pero especialmente en los bulldogs franceses. Esto se debe a sus caras planas y narices cortas, un efecto secundario de la selección y cría artificial de mascotas . Esta condición es causada por sus características: fosas nasales pequeñas y estrechas, un paladar largo y blando y un diámetro de garganta pequeño, lo que dificulta la respiración de estos perros. 

Signos de dificultad respiratoria:

  • problema con el ejercicio y mala tolerancia al calor
  • respiración y ronquidos ruidosos y dificultosos
  • trastornos gastrointestinales como vómitos
  • apnea del sueño

En la mayoría de los bulldogs franceses, el síndrome se expresa en un grado u otro . Suele aparecer entre las edades de 1 y 4 años. La Humane Society, una asociación médica veterinaria, dice que aproximadamente la mitad de ellos muestran estos signos graves. Y las pequeñas fosas nasales de los bulldogs los hacen 20 veces más propensos a desarrollar el síndrome de las vías respiratorias en comparación con otras razas .

Para afrontar el síndrome, es importante limitar la actividad física, controlar el peso del perro y asegurarse de que evite el estrés y el calor. En casos graves, el tratamiento incluye oxigenoterapia y AINE (medicamentos antiinflamatorios no esteroides) para un alivio a corto plazo y, a veces, cirugía para ayudar con la respiración. Las visitas periódicas al veterinario, idealmente cada año, son muy importantes. Ayudan a controlar y tratar eficazmente los problemas respiratorios, mejorando la calidad de vida general de su perro.

3. Dermatitis de los pliegues de la piel.

La dermatitis es común en esta raza de perro. Proviene de sus lindos pliegues, principalmente alrededor de la cara, nariz, cola y vulva. Estos pliegues, aunque estéticamente agradables, crean un caldo de cultivo para bacterias y levaduras, lo que provoca inflamación e infección.

Presta atención a señales como:

  • rascarse, morder y picar constantemente en el área del pliegue.
  • piel enrojecida y dolorosa y llagas
  • piel con mal olor, a veces con secreción amarilla o blanca

Las infecciones suelen comenzar como dermatitis por humedad y migas pegadas en los pliegues. Y si la situación empeora, puede convertirse en una infección bacteriana. Los signos de esto incluyen pérdida de cabello alrededor de los pliegues, descamación de la piel, secreción cremosa y un fuerte olor a levadura.

Para evitarlo, limpia los pliegues de tu mascota a diario. Para ello, puedes utilizar toallitas para el cuidado de perros, un paño húmedo o toallitas para bebés sin perfume. Después de la higiene, asegúrese de secar bien las zonas de la piel. También es beneficioso bañar a tu perro con regularidad.

Si los síntomas persisten o su Frenchie parece molesto cuando lo cepilla, comunícate con tu veterinario para obtener ayuda. El tratamiento puede incluir champús especiales, medicamentos antiinflamatorios, antibióticos, antifúngicos y desparasitantes, según lo que necesite su perro.

4. Golpe de calor

El golpe de calor es un gran problema para los Bulldogs franceses. A diferencia de los humanos, los perros regulan su temperatura corporal principalmente mediante la respiración. Debido a que los Bulldogs franceses a menudo tienen obstrucción braquicefálica, lo que les dificulta respirar, pueden sobrecalentarse fácilmente.  

Consejos rápidos para ayudar a prevenir el golpe de calor en los Bulldogs franceses:

  • Déjalo afuera cuando haga más fresco, como por la mañana o por la noche.
  • Ten siempre agua lista y busca sombra cuando estén afuera.
  • En climas cálidos, mantenlo en un lugar fresco, como una habitación con aire acondicionado.
mascota Bulldog francés

Los signos de insolación incluyen dificultad excesiva para respirar, encías azules o rojas y síntomas graves como vómitos, diarrea o calambres. Por lo tanto, si los notas, enfría inmediatamente a tu perro. Enjuaga su cabeza y cuello con agua fría y busca rápidamente la ayuda de un veterinario. Y recuerda, es mejor prevenir el golpe de calor, así que estate atento al calor que tiene tu mascota.

5. Pioderma

La pioderma, una infección bacteriana de la piel, es común en los bulldogs franceses. Suele ocurrir cuando un corte o raspado en el pliegue se infecta . Las señales a tener en cuenta son:

  • picor
  • enrojecimiento de la piel
  • perdida de cabello
  • la aparición de una costra o pápulas llenas de pus

El tratamiento oportuno con antibióticos tópicos u orales recetados por un veterinario suele ser muy eficaz. Para evitar que se desarrolle pioderma, limpia y seca los pliegues de la piel de su mascota con frecuencia. Utiliza productos seguros para mascotas. El cuidado activo de la piel puede reducir significativamente el riesgo de desarrollar pioderma en los Bulldogs franceses.

6. Problemas oculares

Debido a su hocico plano, los perros de esta raza suelen tener problemas oculares: úlceras corneales, sequedad, ojo de cereza (adenoma del tercer párpado), conjuntivitis y cataratas.

Las úlceras corneales se producen debido a la forma abultada de los ojos . Causas:

  • lesiones
  • sequedad
  • irritación por productos químicos

Los signos incluyen frotarse los ojos y enrojecimiento. Es importante contactar rápidamente con un veterinario.

Ojo seco (queratoconjuntivitis seca): médicamente conocida como queratoconjuntivitis seca, ocurre cuando hay una producción insuficiente de lágrimas, que a menudo es una condición hereditaria en los franceses. Señales:

  • bizco
  • enrojecimiento
  • secreción amarilla o verde de los ojos

Si no se trata, puede provocar úlceras y cicatrices en los ojos. El tratamiento incluye gotas estimulantes de las lágrimas para reponer la película lagrimal y, a veces, antibióticos tópicos o fármacos antiinflamatorios. En casos graves, puede ser necesaria una cirugía: transposición del conducto parotídeo .

Ojo de cereza (adenoma del tercer párpado): la mayoría de los bulldogs franceses están genéticamente predispuestos a esta enfermedad. Esto ocurre cuando la glándula del tercer párpado sobresale y parece un bulto rojo. Aunque la afección no suele ser dolorosa, si no se trata puede provocar sequedad ocular crónica. La cirugía puede devolver la glándula a su lugar. Después de la cirugía, necesitará antibióticos y medicamentos para reducir la hinchazón. El procedimiento suele dar buenos resultados.

Conjuntivitis: los bulldogs franceses son propensos a padecerla, la enfermedad es causada por infecciones bacterianas, virus o alergias. Busca ojos hinchados de color rosa o rojo y secreción extraña.

Catarata: esta afección hace que el cristalino del ojo se vuelva duro y turbio, lo que puede provocar mala visión o incluso ceguera. En los Bulldogs franceses, la condición es genética y requiere cirugía.

Distichiasis: esta afección implica un crecimiento anormal de las pestañas, lo que causa irritación y daño al ojo. Se trata con cirugía para detener las molestias y evitar que se produzcan úlceras.

Es muy importante cuidar los ojos con regularidad, incluido mantenerlos limpios y evitar irritantes. Estate atento a signos como secreción, enrojecimiento o si tu perro se frota los ojos constantemente. La detección y el tratamiento tempranos de los problemas oculares pueden beneficiar enormemente a sus mascotas.

7. Infecciones de oído y sordera

Las infecciones de oído son comunes en los bulldogs franceses. Debido a sus orejas grandes y su hocico plano, tienen canales auditivos estrechos. Por lo tanto, la suciedad y la humedad se retienen fácilmente y son difíciles de eliminar. Este es un lugar ideal para el crecimiento de levaduras y bacterias que causan infecciones de oído conocidas como otitis externa.

Signos de infecciones de oído:

  • rascarse y sacudir la cabeza con frecuencia
  • enrojecimiento o llagas dentro de los oídos
  • mal olor y secreción amarilla o negra de los oídos
  • los canales auditivos aparecen con costras o demasiado gruesos.

Si no se tratan, las infecciones de oído pueden provocar problemas graves como dolor, problemas de equilibrio, parálisis facial, problemas de audición o incluso sordera total. Los Bulldogs franceses también pueden nacer sordos. Los signos de sordera incluyen no responder a ruidos fuertes y dormir más de lo habitual. Una prueba llamada BAER comprueba la sordera. No existe cura para esta afección, pero se puede controlar con métodos de entrenamiento adaptados, como las señales con las manos.

Para tratar las infecciones de oído, los veterinarios suelen recetar antibióticos y antimicóticos. Las enfermedades crónicas pueden cambiar la piel que recubre los canales auditivos, estrechándolos aún más y empeorando el problema.

Infecciones de oído y sordera en mascota

Recuerda: la prevención es clave. Limpia los oídos de tu mascota cada dos semanas con un enjuague especial para oídos o lo que recomiende tu veterinario. Asegúrate de que sus oídos estén secos después de limpiarlos. Este procedimiento no sólo previene infecciones, sino que también ayuda a detectar el problema en una etapa temprana. Si notas signos de enfermedad, comunícate con su veterinario de inmediato.

8. Displasia de cadera

La displasia de cadera es un problema genético común en estas mascotas. Ocurre cuando la articulación se forma incorrectamente. Esto significa que los elementos de la articulación de la cadera no encajan bien entre sí, por lo que se desgasta, se frota y se desgasta rápidamente. Esto suele provocar artritis y enfermedades que pueden provocar dolores intensos.

Presta atención a señales como:

  • dificultad o inestabilidad al caminar
  • dolor o malestar en el área de la cadera
  • problemas para subir escaleras o saltar
  • movimiento de «conejito saltando» o renuencia a hacer ejercicio

Es importante detectar este problema en una etapa temprana. En casos leves, se pueden tomar medicamentos antiinflamatorios (AINE), suplementos para las articulaciones como glucosamina y ácidos grasos omega-3. A veces, la fisioterapia tampoco hace daño. En casos más graves, es posible que se requiera cirugía. Para prevenir la displasia de cadera, mantén a tu mascota en un peso saludable y no le permitas hacer demasiado ejercicio cuando sea un cachorro. Los criadores de renombre suelen tomar radiografías para detectar displasia de cadera en los cachorros. Por eso, a la hora de comprar, pregunta siempre por la salud del cachorro y de sus padres.

9. Dislocación de rótula

La luxación de rótula ocurre cuando la rótula se disloca en la articulación . Este es un problema genético que puede provocar que la copa se resbale, provocando síntomas como:

  • a veces pierde un paso
  • movimientos extraños de las extremidades traseras
  • debilidad repentina

Hay diferentes grados de este problema, desde el nivel uno, que no es tan grave, hasta el nivel cuatro, que es muy grave. Si bien los casos leves sólo pueden causar molestias, los más graves pueden provocar osteoartritis debido al daño continuo de la articulación.

En los grados 3 y 4 de la enfermedad, es posible que se requiera una intervención quirúrgica para profundizar el surco de la rótula. Por tanto, la detección temprana de este problema y su seguimiento constante son muy importantes para la salud del “francés”.

10. Enfermedad del disco intervertebral

La enfermedad del disco intervertebral es un problema de salud importante para los Bulldogs franceses. Esto se debe a sus genes y a sus patas cortas y fuertes. La enfermedad ocurre cuando los discos de la columna se salen o se rompen, dañando la médula espinal. Esto puede causar dolor, daño a los nervios y, a veces, parálisis. Los signos son los siguientes:

  • arrastra las patas
  • espalda arqueada o encorvada
  • grito de dolor cuando lo tocan
  • parálisis repentina que puede ocurrir cuando pierde el control mientras defeca

Si notas estos signos, especialmente parálisis, comunícate con tu veterinario de inmediato. El tratamiento depende de la gravedad de la enfermedad y puede incluir medicamentos o cirugía. Para prevenir el desarrollo de esta enfermedad, mantén a tu mascota en un peso saludable y evita que salte sobre objetos con frecuencia. La detección y el tratamiento tempranos son la clave para controlar esta grave enfermedad.

Conclusión

Si tienes un Bulldog Francés o estás pensando en adquirir uno, es muy importante conocer los problemas de salud de esta raza. Antes de comprar un cachorro conviene saber qué enfermedades suelen padecer los perros de esta raza. Aunque estas enfermedades son tratables, requieren de un cuidado constante del animal. Y los controles veterinarios periódicos de tu perro y la atención de sus necesidades especiales pueden marcar una gran diferencia. Ser un dueño de perro responsable e informado significa ayudar a tu fiel amigo a vivir una vida feliz y saludable. Cuidarlo no es sólo un deber, es un viaje de amor y amistad.  

redactor 3
Jaime Beltrán

Profesional con Grado en periodismo y la comunicación audiovisual. A lo largo de mi trayectoria, he trabajado en diversos medios de comunicación, desempeñándome tanto en redacción como en producción audiovisual. Mi enfoque se centra en la ética periodística, la investigación rigurosa y la creatividad visual, siempre con el objetivo de informar, entretener y conectar de manera significativa con la audiencia.